Con la fecha de inicio del segundo semestre escolar fijada para el 8 de julio, estudiantes y padres se preparan para retomar la rutina escolar después de las vacaciones. Un aspecto fundamental que no debe pasarse por alto, es la recuperación de hábitos saludables de sueño y estudio.

Según los especialistas, el descanso adecuado es crucial para el rendimiento académico. Establecer horarios regulares de sueño ayuda a los estudiantes a sentirse más alerta y preparados para enfrentar los desafíos diarios en el aula. Un sueño reparador no solo mejora la concentración, sino que también fortalece la memoria y facilita la capacidad de aprendizaje.

Junto con el descanso adecuado, es esencial retomar rutinas de estudio efectivas. Organizar la rutina familiar y dedicar tiempo de manera constante para revisar el material de clase y completar las tareas no solo mejora la comprensión de las diferentes materias, sino que también ayuda a los estudiantes a manejar mejor el estrés académico.

La psicóloga Camila Cortés, magíster en Atención Temprana y académica disciplinar de la Universidad de las Américas, Campus Santiago Centro, compartió su opinión sobre la importancia de estos hábitos y cómo la familia cumple un rol esencial en la adaptación de los estudiantes. Menciona que, “si bien las vacaciones son necesarias para recargar energías y enfrentar con ánimo el segundo semestre, es fundamental brindar apoyo a nuestros hijos e hijas durante la transición hacia la vuelta a clases”.

Durante las vacaciones, es común que los estudiantes alteren sus horarios de sueño, lo que puede dificultar el ajuste a la rutina escolar. Para facilitar una transición suave, la experta recomienda:

• Ajustar gradualmente los horarios: Comenzar a dormir y levantarse más temprano varios días antes del inicio de clases.
• Crear una rutina de sueño: Establecer una rutina relajante antes de acostarse, por ejemplo, leer un libro puede ayudar para señalizar al cuerpo que es hora de dormir.
• Limitar el uso de pantallas: Se recomienda evitar el uso de dispositivos electrónicos al menos una hora antes de acostarse para reducir la exposición a la luz azul, que suele interferir con el sueño.

Por otro lado, los buenos hábitos de estudio son esenciales para el éxito académico. Aquí hay algunos consejos prácticos:

• Organizar un espacio de estudio: Asegurarse de tener un lugar tranquilo y ordenado para el aprendizaje, libre de distracciones.
• Establecer un horario para estudiar: Crear un calendario con bloques de tiempo dedicados al estudio y las tareas escolares.
• Utilizar técnicas de estudio efectivas: Practicar métodos como la técnica Pomodoro, que implica estudiar en intervalos cortos con descansos regulares, para mejorar la concentración y la retención de información.

Este retorno a clases representa una oportunidad para establecer hábitos que beneficiarán el rendimiento escolar actual y también, el desarrollo a largo plazo de habilidades de autogestión y disciplina. Al mantener una estructura sólida de sueño y estudio, los estudiantes estarán mejor equipados para alcanzar sus metas educativas y enfrentar cualquier desafío académico con confianza.

Con estos consejos y el apoyo de la comunidad educativa, la Red Educacional San Isidoro se prepara para un inicio de semestre lleno de energía, listos para enfrentar nuevos retos y alcanzar grandes logros.